Obra de Roberto Cedrón

Obra de Roberto Cedrón
Obra de Roberto Cedrón

viernes, 19 de agosto de 2016

PUCHERO MISTERIOSO Y DESPUÉS / Sábado 27 de agosto - 20.00 h


Tata Cedrón, Cuarteto Cedrón, La Musaranga, Nelly Omar, Julio Cesar, Manteniemiento, la Orquesta y más misterios en esta ÚNICA FUNCIÓN ESPECIAL. Sábado 27 de Agosto 20 hs. Teatro El Popular, Chile 2080, Ciudad de Buenos Aires. 

Reservas desde este momento por: www.alternativateatral.com

martes, 16 de agosto de 2016

Mensaje subliminal

Para los amigos que preguntan por el momento y las direcciones donde suceden las cosas: el próximo concierto es en calle Maza 177 (a metros de Rivadavia, C.A.B.A.) y se repite todos los jueves de agosto y septiembre. Programa: Del Gallo Cantor. Cantata (poesía: Juan Gelman, música Juan Cedrón). Horario: 21.00 h. Elenco: Cuarteto Cedrón + La Lija. Mayores informaciones: revisar entradas anteriores. Cordiales saludos. 
LP

Ahora sí... los músicos...



lunes, 15 de agosto de 2016

El arte de hacer feliz

Momentos vividos en la verdulería de José el lunes 15 de agosto. En compañía del Cuarteto Cedrón, el duo Petrogrado, el mismísimo José Ottati y la querida Musaranga. No se crean que faltan los músicos (no llegamos hasta ellos por la cantidad de gente) pero también están presentes en las sonrisas.

***









jueves, 11 de agosto de 2016

Y como si fuera poco... habemus verdulería !

Lunes 15 de agosto.- 13.00 h
En el lugar de siempre, ahora por Jonte, a pocos metros de la famosa esquina.
Se sigue llegando con los colectivos 109 y 135 (entre otros).
Habrá invitados.


lunes, 8 de agosto de 2016

"Nada te asuste, nada te espante" por Tata Cedrón

Tiempo Argentino / 7 de agosto 2016



Para mí hay un hito que ha sido la ausencia. Yo me fui en el 74. Volví a vivir en Buenos Aires en el 2004. Durante diez años no pisé suelo argentino. Luego, a partir del 84, estuve yendo y viniendo. Eso hace que hay muchos músicos argentinos a los que no escuché. De todo género. Y también, a la inversa, hay muchos músicos argentinos que no escucharon al Cuarteto. En esta situación de lejanía hubo muchos compañeros músicos. Entonces, para mí, la cultura porteña de los últimos 30 años también está hecha de ausencias. No sólo se trata de músicos, también de poetas, de actores, de escritores, pintores. Todos muy importantes. Sólidos.

Del punto de vista personal mío, yo me fui con un sonido. Y todos los otros músicos también. Y con una poética que correspondía a una historia y a una raíz muy profunda que se había depurado como identidad, en mezcla de razas y de culturas. Y lo que acá se desarrolló es otro sonido, otra poética, por circunstancias también históricas y políticas. En un momento de la cultura del mundo donde arrasó el neoliberalismo y el mercado.  Me refiero a una penetración a través de los medios de comunicación, grabadoras, editoriales. Veníamos de un periodo oscuro, que fue la dictadura, donde hubo prohibición, voluntad de control, donde los milicos se llevaron también un sonido, trajeron otro, etc. Entonces, sacaron y trajeron lo que les servía a ellos. Costó mucho remontar ese déficit bestial de ignorancia que produjo la dictadura.

Ejemplo: yo no conocía a Charly García, lo digo como símbolo. Cuando me fui era compañero de la Cofradía de la Flor Solar, de Almendra, éramos la misma generación. Después, no supe más de ellos. Esto quiere decir que la cultura se hace con mucha gente, con muchos artistas que comunican entre ellos y eso da un fruto. Entonces, al volver, al no haber escuchado a toda esa gente y ellos, al no haber escuchado al Cuarteto, se produce otro hecho, otro fenómeno.

Hubo un corte. Ese corte no solamente se dio por lejanía. También, como producto de una política de Estado que centró todo en el mercado y permitió la penetración de otras formas de expresión fomentadas por los grandes grupos que manejan la industria cultural a nivel mundial. Este lavado de cabeza condiciona lo que vino después y preparó el terreno de lo que pasó en los últimos treinta años. Si un tipo, en un momento dado, durante un periodo de pobreza y miseria, es ignorante, es brutal, aunque haya luego un cambio de gobierno, esa persona sigue existiendo con esa cultura que tiene y que sigue transmitiendo. Entonces, acá, se prohibió, se dejó de difundir y apoyar otras formas culturales. Insisto: como política. Grandes artistas que habían tenido un papel muy relevante fueron marginados. Y eso también tuvo un efecto.

Para mí hay una metáfora que ilustra esto. Es el caso de los chicos apropiados durante la dictadura. Esos chicos tenían una familia, padres, abuelos, bisabuelos, etc. Tenían, como familia, ritos, valores, costumbres. Sabemos que muchos de ellos fueron apropiados por militares o por familias cómplices de los militares. Esos chicos crecieron en estas familias, con otros valores, ignorando por completo que había habido algo antes. Otra gente, otra manera, otras costumbres.  A mí me parece sumamente relevante que ellos puedan saber de dónde vienen, conocer su historia, su familia de origen y replantearse su identidad con todas esas vivencias. 

Volviendo a la cultura, con todo lo dicho anteriormente, para mí es la misma disyuntiva. Sería sumamente importante que las generaciones que sólo conocen lo que ocurrió culturalmente desde esas políticas centradas sobre el mercado, pudieran conocer lo que había antes. Que era un mercadito… una feria (con humor…). Es lo que está sucediendo. Y es lo que yo rescato de los últimos treinta años. Voy a referirme sobre todo a los músicos, que es lo que más conozco. Hay toda una camada en el tango. Están los que tomaron la posta, caso del Arranque, la Fernández Fierro, Ramiro Gallo, Lidia Borda, y muchos otros. Pero también hay una camada más joven, que tiene una mirada diferente a la anterior, que le da un valor más importante a la poesía, al texto, y que musicalmente, tiene una visión no negativa sobre la tradición.  

Yo tengo la suerte de trabajar con jóvenes polenta. Los del Cuarteto, los de La Musaranga, los de La Lija. También está el grupo de danza de la universidad de La Plata, dirigido por Andrea Castelli. Todos estos intercambios son de una riqueza total.

Lo que se puede lamentar, y no hablo de lo personal, porque sé que muchos compañeros del espectáculo están en la misma situación, es la precariedad de los espacios para expresarse, desarrollarse y crecer. No hay relación entre la diversidad y la riqueza de las propuestas artísticas y los medios que se ponen a disposición de los creadores. Sigue imperando el mercado. Como decía mi vieja: “nada te asuste, nada te espante”.


Juan “Tata” Cedrón

en diálogo con Antonia García Castro

Tiempo Argentino / 7 de agosto 2016


***

Se recuerda que "Del Gallo Cantor. Cantata" (poesía de Juan Gelman - música de Juan Cedrón) se presenta todos los jueves de agosto y septiembre  a las 21.00 h en Hasta Trilce (Maza 177). Está interpretada por el Cuarteto Cedrón y La Lija. Reservas. HASTA TRILCE

viernes, 5 de agosto de 2016

Dieciséis




Que los músicos que interpretan Del Gallo Cantor. Cantata sean dieciséis es fruto del azar que se empeña en hacer las cosas como si alguien las hubiera pensado. Pero es un hecho: nadie lo pensó y son dieciséis. Hombres y mujeres. Todas las edades. Todas las vivencias. Si uno pudiera detenerse en cada uno de los músicos y entrelazar esas vidas armaría un cuadro completo de la historia argentina contemporánea. La historia está ahí. En el escenario. Pasa por ellos. Habita los cuerpos. La manera en que cada músico encara su instrumento (sus distintos instrumentos), canta, recita, calla, mira a los demás. Se hace cargo de la parte que le corresponde. En esa historia. En ese relato. En esa obra que (nos) ofrecen. Sin duda alguna, el reestreno de esta obra en Buenos Aires es un hecho cultural mayor. Para saberlo no hay que leer estas líneas ni otras que se puedan escribir: hay que haber vivido, hay que haber sido tocado por hombres y mujeres, hay que llevarlos adentro, en las desdichas que son las nuestras, en las alegrías que todavía defendemos, en todo lo bello que hemos conocido. Hay que tener conciencia de cuanto se ha combatido –se sigue combatiendo– en tantos y tantos escenarios. (Cada cual el suyo). Anoche, escuchando a los músicos pensaba cuanta ventaja le lleva la música a otras formas de expresión. Si hasta parece que en esta obra, hecha en 1972, hubiera quedado guardado todos estos años un tesoro. Una emoción que se mezcla con la nuestra, la que llevaban dentro esos otros dieciséis. “Oh… amores… dieciséis”. En los relatos del Tata, previo a la Cantata, ellos –y muchos otros– vuelven. En tal o cual anécdota. Están vivos. Se reúnen, hablan, cocinan, leen poesías, escuchamos lo que alguna vez dijeron, viajamos en el tiempo, somos parte del relato, gracias a la voz del Tata que nos convoca y nos hace un lugar. Y cuando todos están reunidos y empieza la Cantata se percibe una vez más que la música ha sido hecha para ser vista. Para ser escuchada recorriendo a los músicos como si ellos también fueran un paisaje. Nuestro. Algo nuestro. Digno de amor. Irrenunciable. Lo mismo que la palabra: dieciséis.

AGC



"Del Gallo Cantor. Cantata" (poesía de Juan Gelman - música de Juan Cedrón) se presenta todos los jueves de agosto y septiembre  a las 21.00 h en Hasta Trilce (Maza 177). Está interpretada por el Cuarteto Cedrón y La Lija. Reservas. HASTA TRILCE